Intel opta por conservar su unidad de redes tras revisión estratégica y mejora financiera
Intel confirmó este miércoles que ha decidido mantener su unidad de redes y comunicaciones, conocida como NEX, dentro de la estructura de la compañía, descartando así los planes de venta o escisión que se habían barajado meses atrás. Tras una exhaustiva revisión de las opciones estratégicas disponibles, la tecnológica determinó que conservar estos activos resulta mucho más beneficioso para el futuro de la empresa que desprenderse de ellos. En un comunicado oficial, un portavoz explicó que mantener a NEX “in-house” facilita una integración más estrecha entre el silicio, el software y los sistemas, una cohesión que consideran vital para fortalecer su oferta a los clientes en áreas críticas como la inteligencia artificial, los centros de datos y el ‘edge computing’.
Inyecciones de capital y alianzas clave
Esta decisión llega en un contexto de renovada estabilidad financiera para el fabricante de chips, que anteriormente había explorado la venta de varios activos para sanear sus cuentas. Durante el verano, Intel logró asegurar inversiones cruciales que cambiaron el panorama: 8.900 millones de dólares del gobierno estadounidense a cambio de una participación del 10%, además de 2.000 millones provenientes de SoftBank Group y otros 5.000 millones de Nvidia. Dave Zinsner, director financiero de la corporación, señaló recientemente que esta fuerte inyección de capital ha mejorado considerablemente la posición de efectivo de la empresa, lo que les permite retener negocios clave como NEX en lugar de venderlos por necesidad inmediata.
Perspectivas futuras y colaboración con Nvidia
Sobre la millonaria inversión de Nvidia, se espera que la transacción se cierre antes de finales de año. John Pitzer, vicepresidente corporativo de Tesorería Global y Relaciones con Inversores, ofreció detalles adicionales durante la Conferencia TIMT de RBC Capital Markets celebrada en noviembre. Como parte de esta asociación estratégica, Intel suministrará una parte personalizada de sus procesadores Xeon para centros de datos, la cual será integrada y gestionada comercialmente por Nvidia. Pitzer también abordó los desafíos operativos actuales, mencionando que la empresa enfrenta limitaciones de suministro que podrían alcanzar su punto máximo en el primer trimestre de 2026, aunque reafirmó el compromiso de mejorar los márgenes y recuperar cuota de mercado.
Reestructuración interna y movimientos ejecutivos
El camino hasta esta resolución tuvo varios giros administrativos. En julio, un memorando redactado por Sachin Katti, quien lideró NEX desde 2023, sugería buscar inversión externa para establecer la unidad como una entidad independiente, alineándose con los planes del CEO Lip-Bu Tan de recortar negocios no esenciales. Sin embargo, el escenario cambió drásticamente: Katti abandonó Intel en noviembre para unirse a OpenAI, creadores de ChatGPT, y la compañía optó por una reorganización interna distinta. En 2024, Intel trasladó su negocio de computación de borde fuera de NEX hacia el Grupo de Computación de Cliente, y movió las soluciones fotónicas integradas al Grupo de Centro de Datos.
Reacción del mercado bursátil
Pese a la confirmación de la noticia, la respuesta inmediata de los inversores fue cautelosa. Las acciones de la compañía registraron una leve caída del 0.3% en las operaciones extendidas del miércoles, luego de haber avanzado menos del 1% durante la sesión regular, cotizando a 43,76 dólares. A pesar de la fluctuación, Intel se mantiene firme en su postura de que la mejor manera de generar valor a largo plazo es manteniendo la unidad de redes integrada bajo su paraguas corporativo.
